Autores:
Juan Carlos Flores López, Ph.D., Profesor Asociado, y Juan Ramón Licona Mejía, Ing., Instructor de Manejo de Recursos Naturales
Departamento de Ambiente y Desarrollo
Los bosques han sido a lo largo de la historia proveedores de diversos bienes y servicios para la sociedad. Han sido la base para el desarrollo de diversos países. Proveyeron madera para construcción de casas, barcos, carretas; carbón para el desarrollo industrial; pieles para vestimenta y calzado y carne para la alimentación. A estos es necesario sumarle los servicios de regulación del ciclo hídrico y de nutrientes, la belleza escénica, entre otros.
Esta provisión de bienes y servicios del bosque llevó en algunos casos a una sobreexplotación del recurso, produciendo la perdida drástica de cobertura forestal. Sin embargo, en Latino América se reconoce que la actividad forestal productiva no es el principal factor de deforestación, sino la conversión de tierras para la producción agrícola. La necesidad de aumentar la producción agrícola y ganadera ha forzado a nuestras sociedades a valorar mejor la producción agrícola sobre las actividades forestales.
En los últimos años hemos tenido un despertar de la sociedad, exigiendo una mejor calidad ambiental. Inició con mayor y mejor protección de las áreas forestales, creándose reservas de bosques para preservar en ellos ciertos atributos de interés para la sociedad. Esto incluye principalmente el uso de áreas para recreación, producción de agua, protección de hábitat para la fauna.
Si bien estos esfuerzos de conservación brindan un cierto grado de protección a nuestros bosques, países como Honduras cuentan con más bosque fuera de las áreas protegidas que dentro. Sumado a esto, existe una gran cantidad de comunidades viviendo en o cerca de areas de bosque. Por esta razón el país ha promovido la forestería comunitaria, como una alternativa para que las poblaciones rurales puedan generar recursos para su desarrollo a partir del manejo forestal responsable.
Como parte del proceso de formación de los estudiantes, ZAMORANO mediante su Unidad Forestal realiza prácticas de manejo forestal. Estas actividades se han concentrado en el Bosque Universitario de Santa Inés, donde ya se levantó la información para la elaboración del plan de manejo. Esta actividad fue desarrollada por estudiantes de 3er año en el módulo de Ordenamiento Forestal.
Con esta actividad los estudiantes aprenden los principios del manejo forestal de bosques de coníferas y su vinculación con el desarrollo local. Las competencias desarrolladas durante el modulo les permitirán a los estudiantes establecer alternativas para el manejo forestal responsable como estrategia para la conservación de los bosques y la generación de ingresos en las comunidades.
En el marco de cooperación de ZAMORANO con las comunidades aledañas al bosque de Santa Inés, la Unidad Forestal está generando nuevos empleos. Con la actividad de limpieza de las areas afectadas por el gorgojo del pino, se brindan 10 empleos directos. Las personas empleadas provienen de las comunidades de El Limón, El Ocotal y Los Lirios, todos en los alrededores del bosque de Santa Inés. Además de estos puestos de trabajo, se han generado otro tipo de servicios, como venta de alimentación para los trabajadores y hospedaje para el personal que viene de fuera del área.
La inclusión de los pobladores locales en las actividades forestales no solo genera ingresos a las comunidades, sino también ayuda a valorar el recurso. Se logra que las comunidades perciban el bosque como un proveedor de servicios ambientales y también como generador de ingresos por la venta de madera. Sumado a esto, se mejoran tanto el capital social como humano de las comunidades. Las personas aprenden a realizar las actividades propias del manejo forestal, como también fomenta la asociatividad.
Se espera a futuro realizar estas actividades mediante la Cooperativa Agroforestal que está en conformación en el área. Esto brindará el escenario para enseñarle a nuestros estudiantes que el bosque manejado de forma responsable garantiza la provisión de servicios ambientales y es un motor para el desarrollo de las comunidades.
