Panamá Rainwater, cuenta con tecnología y certificaciones internacionales de Cosecha de Agua Lluvia. El Ing. De Arco ha trabajado en el diseño, suministro e instalación de sistemas de captación en unos 20 proyectos en empresas privadas como Nestlé y Banco General, así como en instituciones públicas del gobierno panameño.
Ante la crisis mundial de acceso a agua en cantidad y calidad, Francisco De Arco Castillo, clase 2013, se propuso brindar a su país, Panamá, la oportunidad de aprovechar el líquido que cae del cielo mediante la puesta en marcha de un sistema de captación de agua lluvia para usos agropecuarios, saneamiento y consumo humano. Desde Panamá Rainwater (PRW) empresa que fundó, ha implementado decenas de proyectos que han resultado en reducción de costos en diferentes sectores, así como en prevenir la contaminación del agua por escorrentía e infiltración del suelo.
Ante los escenarios actuales, Francisco pretende aprovechar las oportunidades de futuro y promover la resiliencia al cambio climático para reducir el estrés hídrico a través de la cosecha de agua lluvia. Hoy en día Panamá cuenta con la mayor oferta pluvial en promedio de todo Centroamérica registrando un valor de 2,928 milímetros/año. Bajo esa premisa buscó llevar a su país una tecnología que lograra colectar y purificar el agua lluvia de tal forma que pudiera abastecer a personas, el sector agropecuario y sector comercial, y así reducir el uso de agua potable.
Su propuesta ha tenido un impacto positivo y lo ha llevado a implementar el Sistema de Captación de Agua Lluvia (SCALL) en empresas privadas y en el sector público panameño. Además, cumple una misión social al gestionar fondos internacionales para instalar dicho sistema en las áreas rurales e indígenas del país donde más del 50% de la población de escasos recursos no tiene acceso a agua potable, por lo cual muchos niños sufren de enfermedades gastrointestinales e indirectamente afecta su rendimiento escolar.
“Beneficiamos al país reduciendo la presión sobre las plantas potabilizadoras, menos gasto energético por bombeo y aumentamos el acceso de agua segura a familias que nunca han tenido este vital líquido en calidad. Hemos logrado resultados positivos en los distintos modelos de SCALL, especialmente a nivel comunitario ya que las personas han adaptado la tecnología, se han empoderado, se han vuelto resilientes al cambio climático, aumentaron la seguridad alimentaria y han dejado de invertir tiempo en la búsqueda de agua», sostuvo De Arco.
Cepa para ser egresado ZAMORANO
Este graduado que hoy contribuye a cambiar la vida de miles de compatriotas, desde niño fue un apasionado por la agricultura y la ganadería. “Realizaba constantes visitas a la finca de mi tío para hacer tareas en la sección de ganadería de carne y en otras ocasiones me llevaba a la siembra de arroz; pero lo que más disfrutaba era andar a caballo. No fue hasta en el año 2008 cuando mi mamá me comentó que ZAMORANO era una excelente universidad en materia agropecuaria y me recomendó aplicar para alcanzar mis metas”, remembró.
El camino para llegar a ZAMORANO no fue fácil. No contaba con los recursos para pagar sus estudios completos en la universidad donde anhelaba estudiar. Aplicó al programa de becas. “Desafortunadamente, cuando apliqué por primera vez fui rechazado en la admisión. Ese suceso me motivó el doble para volver a aplicar y demostrar que tenía cepa para ser egresado de ZAMORANO. Así que, en el año 2009 volví aplicar y me notificaron que obtuve uno de los mejores puntajes de Panamá, por lo cual era acreedor a una beca completa para estudiar en la Escuela Agrícola Panamericana”, apuntó.
Hoy reconoce que estudiar en ZAMORANO ha influido en su vida profesional. “La exigencia del Aprender Haciendo, el cumplimiento del reglamento interno y la asistencia a clases forjaron disciplina en mi persona para organizar el tiempo. Incluso, me ayudó a formar un carácter tenaz para sobrellevar las situaciones adversas y no darme por vencido fácilmente. Nos enseñan a trabajar de sol a sol”, agregó.
La influencia por el trabajo y la disciplina que lo forjaron ha dado la oportunidad al Ing. De Arco, de llevar a su país el sistema SCALL donde se intercepta el agua lluvia que cae sobre los techos de casas, bodegas comerciales, galeras en fincas y conducirla a través de separadores de primeras aguas lluvias o sedimentadores. Posteriormente, el agua lluvia pasa por un filtro de partículas sólidas o de hojas para ingresar a los tanques de almacenamiento. En este punto, se coloca un cloro flotador, un tren de filtración y sistemas de bombeo solares o eléctricos según las condiciones de cada lugar.
A través de Panamá Rainwater, también ha abierto una sección para iniciar investigaciones en calidad de agua lluvia y encontrar la forma más practica-económica que se pueda utilizar para mejorar las propiedades fisicoquímicas. “Hemos instalado diversos modelos de Sistemas de Captación de Agua Lluvia que se agrupan como: SCALL para usos domésticos y de consumo humano, SCALL para usos agropecuarios que brindan oportunidad de ser autónomos durante 120 días de la época seca y SCALL comerciales para embotellar agua de lluvia”, indicó.
Como especialista en manejo de recursos hídricos pluviales y sistemas agroambientales, este zamorano se encarga de redactar, gestionar, administrar y ejecutar proyectos con fondos internacionales para beneficiar a personas que viven en precariedad hídrica. Adicional, uno de los roles que realiza y que le demanda más tiempo es la transferencia de conocimiento a través de capacitaciones y sensibilizaciones a técnicos gubernamentales, familias y productores agropecuarios.
De futuro prevé con Panamá Rainwater, iniciar las automatizaciones de Sistemas de Captación de Agua Lluvia e implementar nuevas tecnologías como la captación de neblina y captación de agua lluvia por escorrentía superficial.
